Un buen arroz con pescado sabe a brisa marina y a cocina de siempre. El de hoy combina sabores mediterráneos con la textura fiable del Arroz Tradicional Redondo de SOS, para que el grano quede jugoso, absorba bien el caldo y luzca en el plato sin complicaciones. Es de esos arroces que unen a la mesa: sencillo, sabroso y con ingredientes que probablemente ya tienes en la despensa.
Vamos a preparar un arroz meloso con pescado, lleno de matices: el punto fresco de la lima, un sofrito trabajado con cariño y el empujón de un fumet casero que lo envuelve todo. Y si te apetece seguir explorando recetas marineras, echa un vistazo al arroz de pescado de roca o al chupe de pescado, arroz integral y quinoa.
¿Nos ponemos a cocinar? Sigue leyendo y verás, paso a paso, cómo conseguir un plato meloso e irresistible que convierte cualquier comida en una pequeña celebración marinera.
Antes de encender el fuego, deja todo a punto. Lava bien las judías verdes y córtalas en tiras finas. Ralla el tomate natural y ten cerca la carne de ñoras y el pimentón dulce, porque luego todo va rápido. Las almejas necesitan un baño de agua fría con sal durante unos 30 minutos para soltar la arena (si puedes, cambia el agua a mitad de tiempo). Con esto hecho, tendrás el camino allanado y podrás cocinar sin prisas ni sustos.
Si te gustan los arroces marineros, no dejes de probar también este arroz caldoso con cangrejo de río, que es pura gloria marinera.

En una sartén con un chorrito de aceite de oliva virgen extra, dora los filetes de corvina solo por el lado de la piel. Dos minutitos bastan para que queden crujientes por fuera y jugosos por dentro. Sácalos y déjalos reservados, con la piel hacia arriba, para que no se reblandezcan. Ese toque dorado le dará un sabor espectacular al conjunto.

En la misma sartén, añade un poco más de aceite si hace falta y echa el tomate rallado. Déjalo cocinar hasta que se evapore el agua y empiece a concentrarse. Luego añade la carne de ñoras, dale unas vueltas rápidas y, justo después, el pimentón dulce. Mezcla bien, sin despistarte, porque se quema en un segundo. Este sofrito es el corazón del arroz, así que dale su tiempo y deja que el aroma te diga cuándo está listo.

Incorpora el Arroz Tradicional Redondo de SOS y remueve durante un par de minutos. Notarás que los granos empiezan a brillar y a sonar diferente: ese es el momento justo. Este paso, conocido como “nacarar”, es clave para que el arroz quede suelto y meloso al final.

Vierte el fumet casero caliente de una sola vez y remueve suavemente para que el arroz se reparta bien. Tiene que quedar cubierto, pero sin pasarte de líquido. Deja que hierva y empieza a disfrutar del olor: ya apunta maneras.
Durante los tres primeros minutos, mantenlo a fuego fuerte para que arranque con energía. Luego bájalo a fuego medio y déjalo unos diez minutos más.

Mientras el arroz hace lo suyo, prepara una salsa que va a darle un golpe de frescor al plato. En el vaso de la batidora pon perejil fresco, zumo de lima, un chorro de aceite de oliva virgen extra y otro de aceite de girasol. Añade un huevo y emulsiona con calma hasta que espese. Salpimenta al gusto y guárdala en la nevera hasta el final. Queda ligera, cítrica y con un color precioso.

Cuando veas que al arroz le quedan unos cinco minutos, añade las judías verdes y las almejas. Se abrirán con el calor y soltarán su jugo, enriqueciendo el caldo. El aroma que se forma aquí ya te avisa: vas por buen camino. Después corta la corvina en trozos manejables y colócala sobre el arroz por la parte que aún está un poco cruda para que se termine de hacer.
Ahora nos adentramos en «Misión Socarrat», para conseguirla, sube el fuego al máximo los dos últimos minutos y no lo toques. Escucharás ese chisporroteo suave del fondo de la sartén: eso es el socarrat formándose. Déjalo hacer, sin miedo. Si huele a tostado (pero no a quemado), lo tienes. Ese toque tostado es pura magia. No remuevas, deja que el arroz trabaje solo.

Apaga el fuego y deja reposar el arroz un par de minutos. Sirve enseguida, con unas cucharadas de mayonesa de lima y perejil por encima, un poco de ralladura de lima y unas escamas de sal. Queda de revista: colorido, aromático y con ese brillo que abre el apetito.

Y ya lo tienes: un arroz con pescado meloso, con sabor a mar y un puntito cítrico que lo hace irresistible. Perfecto para compartir y repetir. Si después de probarlo no te piden la receta, te invito yo al siguiente arroz.

Con esta receta no solo vas a preparar un arroz con pescado meloso y lleno de sabor, también vas a descubrir lo que hace tan especial a la cocina mediterránea: productos frescos, calma frente al fuego y ese toque casero que lo cambia todo. Si controlas los tiempos y usas un buen Arroz Tradicional Redondo de SOS, el éxito está asegurado: cada grano absorberá el mar en su punto justo.
¿Te has quedado con ganas de más? Entonces prueba este delicioso arroz con almejas o atrévete con un arroz con chipirones lleno de carácter. Con Arroz SOS, cada plato es una excusa perfecta para reunir a los tuyos, brindar y disfrutar del sabor de casa.