Quinoa con verduras y huevo

tiempo de preparacion 22'-18' min
numero de comensales 4 personas
numero de comensales 40' min
numero de comensales Española
Calorías por ración: 450 kcal por cada 100 gramos kcal

Ingredientes

Elaboración

  • Arrancamos nuestra receta preparando el ingrediente principal de este plato: la quinoa blanca. Para ello, enjuagamos la quinoa en un escurridor con agua fría. En segundo lugar, ponemos una cacerola en el fuego con medio litro de agua, la quinoa y una cucharada sopera de sal.

  • Lo ponemos todo a fuego fuerte y, cuando veamos que empieza a hervir el agua, bajamos la temperatura del fuego y dejamos cocer durante 10 minutos. Luego dejamos reposar durante 5 minutos y ya estaría nuestra quinoa lista para comer. Pero, aún quedan varios pasos de esta receta antes de servir en la mesa.

    Quinoa Blanca

  • De hecho, podemos aprovechar mientras se cuece la quinoa para ir preparando los siguientes ingredientes. Así, lavamos todas las verduras y pelamos la cebolla, la zanahoria y el calabacín. En el caso de este último es opcional pelarlo. Hay a quien le gusta con piel y a quien no. Cabe recordar que la piel presenta nutrientes y fibra, siendo una opción más saludable aún si optamos por dejar el calabacín con ella.

    Calabacín cortado

  • Una vez peladas y lavadas todas las verduras, vamos a cortarlas en dados pequeños. A continuación, ponemos una sartén con una cucharada de aceite en el fuego y, cuando esté caliente, añadimos la cebolla y sofreímos a temperatura media durante unos minutos, removiendo de manera continua. Seguidamente, echamos los pimientos, el calabacín y la zanahoria y seguimos sofriendo. Para que se pochen bien todos los ingredientes, podemos servirnos de una tapa.

  • Dejamos que se sofría todo bien durante unos 20 minutos, vigilando en todo momento que no se peguen las verduras a la sartén. Pasado este tiempo, con todos los ingredientes doraditos en la sartén, ponemos especias o hierbas provenzales al gusto e incorporamos la quinoa. Se remueve todo junto y se deja reservado aparte a la espera del último toque.

    Sofreímos todo en una sartén

  • Es el turno de los huevos.  Podemos hacerlos con dos técnicas: la tradicional o la libre de grasas. La primera opción sería con una gran cantidad de aceite muy caliente. Se echa el huevo y se fríe rápido, retirándose de la sartén con cuidado para que no lleve mucho aceite o se rompa. Se le añade un poco de sal por encima una vez sacado de la sartén.

  • La otra manera de cocinar el huevo sería sin aceite de la siguiente manera: primero, ponemos una sartén pequeña en el fuego y añadimos un poco de agua, de manera que se cubra el fondo de la sartén, y una pizca de sal; dejamos que el agua llegue a hervir y echamos el huevo; ponemos la tapa a la sartén y cuando veamos que está cocinado lo sacamos con una paleta para que no tenga mucha agua.

    Cocinamos el huevo

  • Sea cual sea el método utilizado, el huevo estará de la misma forma en nuestro plato de quinoa, el cual preparamos primero con la base de quinoa y verduras y el toque final del huevo frito encima. Sin duda, una opción deliciosa y llena de nutrientes que se puede preparar tanto para la comida como para la cena. Además, es sin gluten y sin lactosa y es apto para vegetarianos. Si quisiéramos una opción vegana, lo podemos hacer sin huevo. 

10 cosas que debes saber sobre la quinoa, el ‘superalimento’ de moda

La quinoa ha asaltado nuestra cocida con gran fuerza en los últimos años, siendo un alimento muy recurrido para recetas rápidas y saludables. Pero ¿Qué es la quinoa? ¿Cuáles son sus propiedades? ¿De dónde viene?… Te respondemos a todas las dudas con un listado de las 10 claves de este ingrediente que tantas pasiones levanta:

1.La quinoa es originaria de América (Sudamérica y Estados Unidos, más concretamente). Se trata de un pseudocereal que suele utilizarse como sustituto del arroz en ensaladas o recetas similares, pudiéndose comer tanto fría como caliente después de su cocción.

2.Su origen histórico se halla en los Andes, siendo usada hasta por los incas. Como curiosidad, destaca que la quinoa fue utilizada antiguamente para curar lesiones en los huesos.

3.Hay tres tipos principales de quinoa: blanca, roja y negra. Estas son las variedades más comercializadas, pero también existen otras como la naranja o la morada. Y cada una presenta propiedades, sabor y apariencia diferente, por lo que le hace ser un ingrediente muy atractivo.

4.Es considerada por muchos como ‘superalimento’ por su alto valor proteico y energético. De este modo, se recomienda ingerir este ingrediente tras la práctica de actividad físico, siendo una opción muy buena para las cenas al ser muy digestiva.

5.Es apta para personas celíacas, al no tener gluten, para intolerantes a la lactosa y para vegetarianos o veganos. De ahí que su uso se haya incrementado como una variante más en las dietas y las cartas de los restaurantes en los últimos años.

6.También se presenta como una buena opción para diabéticos por tener un bajo valor glucémico. E incluso para personas que buscan una dieta libre de colesterol o grasas, siendo una opción muy saludable.

7.Entre sus propiedades nutricionales destaca la presencia de fibra, por lo que ayuda a prevenir el estreñimiento y a llevar una dieta equilibrada para regular el sistema digestivo.

8.Además, también cuenta con altos niveles nutricionales debido a su contenido en fósforo, manganeso o magnesio, aportando también hierro, calcio, zinc, vitamina E o vitamina B9, que suele ser necesaria durante el embarazo para el buen crecimiento del bebé.

9.Por otro lado, la quinoa ayuda a prevenir enfermedades como el cáncer de mama o patologías cardiovasculares, además de combatir la tuberculosis o la diabetes de tipo 2.

10.Como plus, la quinoa se puede congelar y dura hasta una semana cocida en el frigorífico, por lo que aparece como una gran opción para los que por trabajo no tienen tiempo de cocinar durante la semana.

Como podemos ver, la quinoa tiene grandes ventajas como alimento. Por ello, en SOS hemos apostado por incluirla en nuestro catálogo de productos. En él se pueden encontrar dos tipos: la variedad SOS Vidasania Quinoa Integral con Quinoa Roja y SOS Vidasania Quinoa. Ambas se pueden utilizar tanto para recetas de ensalada (una ensalada de quinoa, aguacate y naranja, por ejemplo) como para hacer hamburguesas de quinoa u otros platos con estos ingredientes. También puedes probar a hacer quinoa con verduras.