Arroz amarillo casero que te hará recordar la tradición

Elaboración

• Sofríe el pollo con amor

  Vamos a comenzar calentando un buen chorro de aceite de oliva en nuestra cazuela amiga. Luego, añadimos esos jugosos trocitos de pechuga de pollo, dejándolos dorar hasta que sus lados queden crujientes y deliciosos. Este toque de cariño es clave para enriquecer nuestro irresistible arroz amarillo.

  Recuerda que ese dorado no es solo un capricho visual, ¡es magia culinaria! Aporta una textura maravillosa y libera nutrientes que harán de esta receta un plato principal equilibrado y saludable. Una vez dorado el pollo, lo retiramos y reservamos.

  

• Preparar el sofrito

  En la misma cazuela que usaste antes, añade un chorrito más de aceite de oliva si ves que se queda corta. Sofríe la cebolla y el ajo picaditos hasta que el aroma empiece a inundar la cocina y se vean translúcidos. Luego, echa los pimientos verdes y rojos en cubitos. Cocina todo junto hasta que los pimientos estén tiernitos y la cebolla doradita.

  En cuanto el sofrito esté en su punto, es momento de agregar el tomate rallado. Cocina hasta que el tomate pierda parte de su jugo y los sabores se combinen de manera espectacular. Este toque no solo enriquece nuestro arroz amarillo, sino que también le da ese color vibrante que todos amamos ver en la mesa.

  

• Mezcla el pollo y el arroz con el caldo

  Devuelve a la cazuela esos deliciosos trozos de pollo dorado, dejando que se mezclen con el sofrito. Es como cuando los viejos amigos se reencuentran: se combinan a la perfección para dar sabor. Ahora añade tu Arroz SOS Tradicional y remueve bien, asegurándote de que cada grano absorba esa explosión de gusto que has creado.

  Aquí es donde el caldo de pollo y el azafrán entran en acción, coloreando de amarillo nuestro plato y aportándole ese sabor espectacular. Deja que el arroz se cocine a fuego lento durante 15-17 minutos. Es como ver una buena peli: despacito y con amor para no perder detalle.

  

• Dale el toque final con zumo de limón y tomillo

  Cuando el arroz amarillo casi esté a punto, llega el momento de darle ese encantador toque final. Añade un chorrito de zumo de limón y espolvorea tomillo seco junto a un poco de perejil. Imagínate la cocina inundada de frescura y acidez, completando la experiencia que danza entre el sofrito y el azafrán.

  Es vital que mezcles bien y permitas que tu creación repose unos minutos fuera del fuego. Así, los sabores se asientan, y el arroz alcanza su textura soñada. Sirve este plato principal bien caliente, asegurando que cada bocado sea un regalo lleno de sabor.

  

Conclusión

En Arroz SOS, buscamos siempre ofrecerte no solo productos de alta calidad, sino también compartir esos truquillos de cocina que hacen que cada grano de arroz brille en el plato. Así que, tanto si estás en una fase de mejora culinaria o simplemente quieres sumar un éxito más a tu repertorio, el arroz amarillo es una opción excelente que, sin dudas, conquistará paladares y se adapta a distintas ocasiones.

Esperemos que estos pequeños consejos y respuestas hayan sido de ayuda. Con práctica y los ingredientes apropiados de Arroz SOS, pronto estarás creando platos que serán recordados y disfrutados por todos tus comensales con una sonrisa. Como recomendación personal, te animo a que también explores nuestra receta de arroz caldoso de pollo, el cremoso de arroz con pechuga de pollo, y la clásica receta de arroz con pollo. Cada una de ellas te hará redescubrir el encanto de la cocina casera.