Cuando pensamos en la esencia de la gastronomía mediterránea, la paella es una de las recetas que más rápidamente nos viene a la mente. Este plato, auténtico baluarte de la cocina valenciana, tiene tantas versiones como amantes a la cocina. Pero hoy te propongo disfrutar de una deliciosa y reconfortante paella de pollo y verduras. Perfecta para esos domingos en los que el simple aroma del arroz cociéndose te traslada a los mejores momentos en familia.
Antes de dar rienda suelta a tus habilidades culinarias, conviene tener a mano todos los ingredientes frescos, como el pollo, las verduras y, por supuesto, el arroz SOS Bomba que hará magia en tu paellera. ¿Todo listo? Pues toca atarse el delantal y preparar un suculento caldo de fondo. No hace falta ser un chef con estrella para salir triunfante; basta con amor y un buen cucharón para remover. Así que no te preocupes si la primera no te sale perfecta, lo importante es seguir insistiendo. ¡Buen provecho!
Por cierto, si te quedas con ganas de más, no dudes en probar el sabroso arroz de pollo con caldo o el exquisito arroz con alcachofas y pollo. Te aseguro que te dejarán con ganas de repetir y compartir.
Una buena mise en place, la preparación previa, como dicen los franceses, hará que todo fluya como si estuvieras en un programa de televisión. Así que antes de nada, ten todos los ingredientes a mano. Ahora sí, empecemos con la parte más terapéutica de la receta: ¡picar las verduras! Coge ese cuchillo afilado y corta el pimiento verde, las jugosas judías y los espárragos trigueros. No te olvides de los ajos y las alcachofas. Esta es la magia que hace que la paella de pollo y verduras cobre vida.
Para el pollo, corta la pechuga en daditos que se unan con todos esos sabores en la sartén. ¿Te has dado cuenta de cómo el aroma empieza a llenar tu cocina? Todo está listo para esa paella que promete convertirse en el plato principal más sabroso y tradicional sin gluten.

Una vez que lo tenemos todo picadito, vamos a darle vidilla a nuestra paella de pollo y verduras empezando por los espárragos. Calienta un chorrito de aceite en la paella, y cuando esté caldeadito, ¡es momento de que los espárragos hagan su magia! Agrega una pizca de sal y deja que se doren. No tengas prisa, lo bueno se hace esperar.
Cuando estén listos y dorados, retíralos con cuidado. Este es un plato principal que merece su tiempo, así que disfruta del aroma que llena la cocina mientras tanto. Aquí es donde empieza a sentirse un poco esa nostalgia española, como si oliera a domingo en casa de la abuela.

En el mismo escenario donde los ajos ya han comenzado su danza, sumamos al reparto pimientos y alcachofas. Todo rehogado con paciencia. Aquí llega nuestra estrella, la pechuga de pollo, cortada en pequeños bocados. A medida que va dorándose, las judías verdes se suman al espectáculo.
Cuando la cocina se llene de aromas que recuerdan a un domingo en casa, es el momento de incorporar los tomates picados. Espolvorea azafrán para darle un toque mágico. Remueve con cariño y deja que las verduras se doren a su ritmo, en un fuego medio que hará que todo se combine como por arte de magia.

Ahora es el momento de darle protagonismo a nuestro querido Arroz SOS Bomba. Agrégalo con mimo a la sartén como si estuvieras añadiendo tesoros a un cofre. Es importante que el arroz esté bien distribuido, así cada grano absorberá todo el sabor de la paella de pollo y verduras que estamos creando.

Al añadirlo, no olvides remover suavemente para que se empape de ese caldo sabroso, casi como un ritual de bienvenida. La magia de este plato español la sentirás en cada paso, ya verás. ¡Deja la foto de Instagram para el final!
Es hora de darle vida al alma de esta receta: el caldo. Vierte un litro de caldo de pescado o de pollo en la paellera, mientras aprovechas para bajar el fuego a media potencia. ¿Cómo sabes si hay que ajustar de sal? Pruébalo; aquí está el arte de la paella de pollo y verduras.
Un truquito que me encanta: agrega un poco de azafrán para ese toque español inconfundible. Ahora, deja que el arroz se sumerja tranquilamente durante 15 minutos, absorbiendo todo el sabor. Al cocinar a fuego lento, sentirás cómo el aroma de la receta sabrosa invade tu cocina, como una cálida bienvenida a casa un domingo.

Ya casi estamos, así que tómate un respiro. Deja que la paella se relaje durante unos 5-10 minutos. Mientras tanto, imagina esos domingos en casa, cuando el olor del arroz recién hecho nos acercaba a la mesa. ¡No hay prisa, solo pura anticipación!
Este momento de reposo es crucial para que los sabores terminen de mezclarse. Además, te dará tiempo para servir la mesa y quizás abrir una buena botella de vino. Ahora sí, ¡a disfrutar de esta deliciosa paella de pollo y verduras, digna de un festín familiar! ¡Así da gusto!

La paella de pollo y verduras es una receta clásica que enamora desde el primer día. Con un sabor auténticamente delicioso y un aspecto que llama la atención, esta paella es perfecta para disfrutar en eventos o encuentros con familiares y amigos. ¿Te animas a prepararla para tu próxima celebración?
Y si te quedas con ganas de seguir experimentando, te recomiendo echarle un vistazo a esta receta de arroz alcachofas con pollo, el cremoso de arroz y pechuga de pollo o incluso un interesante arroz con brócoli y pollo. ¡Te aseguro que no te arrepentirás de probar estas delicias!